EL HUMANO PERFECTO.

IBA EL DE LA MANO COMO UN NIÑO,
PASEANDO SUS ENCANTOS POR LA VIDA.
TAN NATURAL Y ESPONTANEO,
QUE CRECÍAN BAJO SUS PIES
ROSAS BLANCAS.

ESTABA ENAMORADO DE LO AUTENTICO
Y NUNCA LLEVABA MASCARA,
PORQUE ENTENDÍA...
QUE SU ESTADO DE ANIMO DEPENDÍA
DE COMO SE SENTÍA.
ASÍ ERA EL ...TODO UN HOMBRE

NO HABÍA MAÑANA QUE NO LE REZARA A SU IMAGEN,
NI NOCHE EN QUE NO AGRADECÍA LA EXPERIENCIA DEL DÍA
SABIA QUE LO QUE RECIBÍA
ERA UN REGALO,
Y NO LE IMPORTABA AGRADECÉRSELO AL MUNDO.

CUANDO LE CRITICABAN
NO SE INDIGNABA
NO LES PRESTABA ATENCIÓN
Y DEJABA QUE LOS ENOJADOS
SE PERDIERAN EN SUS PROPIOS INSULTOS.

CUANDO LE MANIPULABAN,
SABIA DECIR QUE NO
Y MANTENERSE EN SU PROPIO CAMINO
SIN POR ELLO OFENDER A QUIEN LO MANIPULARA.
SENCILLAMENTE
LOS DEJABA CON LA PALABRA EN LA BOCA...
 Y ACTUABA SEGÚN SUS PROPIOS CRITERIOS.